Las leyendas son portadoras de creencias, de tradiciones, de costumbres y evidencian la cultura de un pueblo, plasmada en numerosos diseños de sus textiles. Los mapuche chilenos y argentinos recuerdan que una araña vieja llamada LLALIN KUSHE es la NGUEN(dueña) del hilado y del tejido, protectora, maestra, que cuida y protege a las ÑEREFE (tejedoras) de las fuerzas negativas, de los WEZA NEWEN que las impulsan al error.
El hilado y la araña vieja
"Un día una niña lavaba en un río, en el campo, estaba lavando la ropa y de pronto vino un hombre y la raptó, se la llevó lejos, a las tierras donde él vivía, al tiempo después se casó con ella y un día le dijo: Me voy para Chile y cuando vuelva, que será pronto, me debes tener toda esta lana hilada.
Había un montón de vellones, a todas sus ovejitas las había esquilado el hombre. Y cuando se quedó solita, (ya se había ido el marido ), la niña se puso a llorar, al lado del fuego, pues ella ¡no sabía hilar! Entonces una voz (era CHOÑOIWE KUSHE, fuego vieja) le dijo: no llores más, yo voy a buscar a LLALIN para que te ayude. Pronto bajó la LLALIN KUSHE diciéndole: tienes que hacer igualito que yo. Todas las noches bajó la araña para ayudarla y enseñarle, hasta que la niña aprendió y cuando regresó el marido tenían toda la lana hilada, había terminado su trabajo"